El 22 de Junio se convirtió en un día que marcó a los franceses, su nación capitula ante el enemigo
Para entender todo esto, hay que remontarse al 1 de septiembre de 1939, momento en que da comienzo la Segunda Guerra Mundial, cuando Alemania invade a su vecina Polonia.
Esto produjo la inmediata declaración de guerra de Francia con la mayor parte de los países del Imperio británico y la Commonwealth al Tercer Reich.
Estas declaraciones no afectaron a los planes de Alemania, así que tras anexar su parte de Polonia (se la repartió con la URSS) se tomó el invierno de descanso, y llegada la primavera, invadió Dinamarca y Noruega el 9 de abril de 1940, en la Operación Weserübung.
Poco después, el 10 de mayo de 1940, invade Luxemburgo, Bélgica, los Países Bajos e inicia su ataque sobre Francia.
Finalmente, el 22 de Junio, Francia capitula ante Alemania en Rethondes, en el vagón del armisticio (el mismo en el que se había firmado el armisticio del 11 de noviembre de 1918 que puso fin a la Primera Guerra Mundial) en el tratado, se cedieron París y dos tercios del país, y en la zona restante se establece un estado títere de Alemania conocido como Francia de Vichy.
Como París ya había capitula do el día 14, y el gobierno se estableció en Burdeos, muchos dirigentes políticos de toda la nación, presionaron al gobierno para capitular.
En el armisticio se incluyen los siguientes artículos:
Los prisioneros de guerra franceses (más de millón y medio de hombres) siguen en cautividad hasta la firma de un acuerdo de paz.
El sector norte de Francia, así como toda su costa atlántica, quedan bajo la ocupación militar alemana, constituyendo la llamada zona ocupada, que abarca aproximadamente el 60 % del territorio. El resto constituye la llamada zona libre, es decir, la no ocupada por la Wehrmacht y situada bajo autoridad únicamente francesa, zona ubicada principalmente al sur del río Loira. Ambas zonas se hallaban separadas por la llamada línea de demarcación.
Francia debe proveer el mantenimiento del ejército alemán de ocupación, sufragando sus gastos. El importe de dicho mantenimiento es fijado de forma casi discrecional por los alemanes, siendo, como media, de unos 400 millones de francos al día.
En la zona libre, el ejército francés queda limitado a 10 000 hombres y dichas tropas quedan privadas de todo armamento pesado, así como de aviación de guerra.
La soberanía francesa se ejerce sobre el conjunto del territorio, incluida la zona ocupada, Alsacia y Mosela, pero en la zona ocupada se estipula que Alemania ejerce «los derechos de la potencia ocupante», lo que implica que la Administración francesa «colabora» con ella «de una manera correcta».
El Imperio colonial francés queda igualmente bajo la autoridad exclusiva del Gobierno francés.
Los buques de guerra franceses deben acudir a sus puertos de amarre de períodos de paz, aunque alguno de ellos, como el de Brest, se hallase en la zona ocupada.
Francia debe entregar a los refugiados políticos alemanes o austriacos refugiados en su territorio huyendo del nazismo.
Hug Masa I Badia @hug_msbd