Las termópilas españolas

El asedio de Castelnuovo

Contexto

El poderío del Imperio otomano desde su fundación era sin duda algo que no se debe olvidar. Castelnuovo mostró una vez más que los tercios eran las unidades más poderosas del momento.

Durante todo el siglo XVI las hordas turcas se dedicaban a arrasar y conquistar territorios por todo el Mediterráneo.

El almirante otomano Barbarroja conquistaba islas pertenecientes a la República de Venecia. Rápidamente los temerosos venecianos fueron en busca de aliados. Así en 1538 se formó una nueva alianza católica, en ella estarían Venecia, la Santa Sede y el Imperio español. En total una flota de 300 barcos y 55.000 soldados aproximadamente, no obstante solo se pudieron reunir 130 galeras y unos 15.000 guerreros. Tras varias victorias y una derrota, la nueva Liga Santa se disolvió debido a disputas territoriales por la ciudad de Castelnuovo. Finalmente acabó en manos españolas.

Fuerzas en combate

La ciudad quedó guarnecida únicamente por 4000 soldados españoles, aproximadamente. Estos se agruparon formando un nuevo tercio, el de Castelnuovo, dirigido por Francisco de Sarmiento.

Por otro lado el sultán ordenó a su almirante reagruparse y armarse para sitiar Castelnuovo. En total 20.000 soldados aproximadamente la asediaron. Además el gobernador otomano de Bosnia la cercaría, también, con 30.000 soldados más.

La preparación

En junio de 1539, Barbarroja ordenó desembarcar a 1.000 soldados, de esto se percató Francisco de Sarmiento y este mandó interceptarlos. Finalmente la pequeña incursión fué repelida. Predeciendo la pérdida de tiempo y vidas, Barbarroja ofreció a Francisco de Sarmiento una rendición honrosa y el le contestó: «viniesen cuando quisiesen».

Durante 5 días, los zapadores turcos preparaban trincheras y lugares dónde colocar los cañones, Francisco preparó las defensas. Entre todo este periodo los castellanos hacían repetidas salidas para retrasar los planes otomanos. Debido a las constantes incursiones, los turcos sufrieron un número de bajas considerable.

Derrota Heroica

El 23 de julio los otomanos decidieron tomar la ciudad y se inició el asalto final. Las bajas propiciadas por los tercios sumadas al fuego amigo de las baterías turcas no se podían contar. A lo largo de la noche los españoles repararon sus defensas.

Durante los días siguientes los otomanos lo intentaron, pero la defensa castellana  no cedía. No obstante los humanos no son eternos ni son infinitos sus recursos. Por cada acometida, los defensores sumaban nuevos heridos y perdian pólvora, comida o balas. En uno de los asaltos, los turcos capturaron a 2 españoles desertores que traicionaron a Castelnuovo, estos confesaron  de no cesar en su empeño.

El 7 de agosto don Francisco con apenas 600 hombres, exhaustos y sin pólvora ni armas de fuego, resistieron con espadas y picas a muerte. A la tarde, la ciudad pasó a ser del Imperio otomano.

La ciudad le costó al sultán 20.000 hombres aproximadamente.

Mi visión

Esta es sin duda una de las mayores gestas realizadas por el Imperio español y su ejercito profesional. La clásica historia del pequeño contra el titán. Esta historia es bautizada como «Las termópilas modernas», no obstante yo he preferido suplir «modernas» por «españolas» ya que en la historia existen otras contiendas que merecen un apodo parecido.

JESÚS INAREJOS

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