SOCIEDAD: Un año del primer confinamiento en Wuhan: un aniversario marcado por los rebrotes. Aquel 23 de enero, a las diez de la mañana, la ciudad de Wuhan fue sellada a cal y canto. De golpe, los autobuses y trenes dejaron de circular, los aviones estaban parados y sus once millones de habitantes quedaron bloqueados. Pese a que de inicio fue tildada de excesiva, la medida se mostró efectiva, y a la postre fue clave para que China recuperara una normalidad alterada estos días por la aparición de nuevos y preocupantes rebrotes. Los días de enero del 2020 fueron extraños, pródigos en rumores. Tan solo tres semanas antes se había comenzado a hablar de una neumonía atípica relacionada con un mercado a la que luego bautizarían como Covid-19. “Está claro que las autoridades chinas podrían haber aplicado de forma más contundente medidas de salud pública en enero”, ha criticado esta misma semana un informe de una comisión de expertos independientes. El estudio también reprochó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) su tardanza en informar y lanzar una llamada de alerta, un nuevo tirón de orejas a una institución muy criticada por su supuesta complacencia hacia China. Tras 76 días confinados, en los que Wuhan acumuló el 60% de los contagios chinos (unos 88.000) y más del 80% de los 4.635 fallecidos, la ciudad volvió a ser libre. Poco a poco, con las cicatrices más o menos visibles, fue recuperando la normalidad. Sin embargo, el momento dulce del aniversario se ha amargado en las últimas semanas con la aparición de brotes todavía no controlados (van más de mil contagios y subiendo) que han hecho saltar las alarmas. 📸 Wuhan pocos días después de decretarse el confinamiento, 23 de enero de 2020 / La misma ciudad china este 22 de enero de 2021, con las luces del Festival de Primavera encendidas.